Ahorrar dinero para la universidad es fundamental, ya que, como bien sabes, su costo ha incrementado con los años y los padres y familiares no siempre pueden disponer del monto necesario para pagarla. Así que es hora de tomar esas riendas y usar todos los métodos posibles para conseguir este objetivo.
Y es que en este contexto, una de las principales tendencias que hoy los estudiantes ponen en práctica es financiar la educación superior a partir de ahorros y no de préstamos bancarios. Pero, ¿cómo podemos lograrlo?
Como buena noticia, hoy te diremos que existen diversos métodos con los que conseguirás guardar el dinero necesario para culminar tu licenciatura y aquí descubrirás cuáles son.
¡Continúa leyendo!
Asumiremos que si estás leyendo este artículo es porque necesitas empezar a ahorrar dinero para tu licenciatura, ¿y qué mejor momento para empezar que ahora mismo?
En principio, debes tener en cuenta puntos importantes como:
Ahora bien, para iniciar este proceso de una vez, te traemos algunas opciones sencillas que te ayudarán a ahorrar:
Investiga cuál banco te da un mejor porcentaje por guardar tu dinero y cuál tiene algún fondo universitario. De esta forma tendrás una alcancía en la que sabes que sólo podrás ingresar dinero, pero nunca retirar.
Para determinar cuánto dinero puedes ahorrar es fundamental conocer cuánto gastas. Haz un seguimiento de todos los pagos que haces, tomando en cuenta:
Luego de conocer cuánto gastas, organiza tus prioridades y haz un presupuesto fijo para cada una de las categorías.
También es recomendable agregar un monto extra llamado “ahorros” y reunir ahí, por lo menos, el 10% de tus ganancias mensuales.
Si luego de registrar tus gastos notas que son altos y no puedes ahorrar como quisieras, es momento de recortarlos.
Identifica cuáles cosas no son esenciales y en cuáles puedes gastar menos, como por ejemplo tu entretenimiento e idas a restaurantes.
Además, puedes reducir tus gastos tomando en cuenta lo siguiente:
Una de las mejores formas de ahorrar dinero para la universidad es a través de la inversión.
Para conseguir hacerlo de forma adecuada lo primero que debes saber es cómo hacerlo y cuál compañía es tu mejor opción. Reúnete con especialistas que te asesoren para lograr un resultado satisfactorio.
Ten en cuenta que este punto es riesgoso y, sin el conocimiento adecuado, puede resultar en pérdidas en lugar de ganancias.
Aunque parezca no tener mucho sentido, puedes usar a tu favor fechas especiales como tu cumpleaños, Navidad, aniversarios con tu pareja, Día del Padre o de la Madre, ascenso en el trabajo y San Valentín.
¿Cómo? Es sencillo, pídeles a tus familiares y amigos que en lugar de hacerte una fiesta, invitarte a una cena o darte un regalo, te den el equivalente en dinero, ya sea en efectivo o transferido en tu cuenta de banco destinada a tu fondo de ahorro universitario.
De esta forma, a lo largo del año tendrás un ingreso extra que claramente te ayudará en tu travesía de ahorrar dinero para la universidad.
Sin embargo, ten en cuenta que debes dejar en claro lo importante que es que te ayuden de esta forma en tales fechas y no con otras cosas materiales, así tus seres queridos entenderán lo valioso que es para ti lograr tu meta. Incluso se sentirán felices de ser parte de ésta y orgullosos de tu determinación.
Si has ahorrado y sientes que no podrás asumir todos los gastos, ¡no entres en pánico! Las subvenciones y becas son la mejor forma de ayuda financiera, ya que no tendrás que devolver ese dinero.
Podrás conseguir esta ayuda a través de la Coordinación Nacional de Becas de Educación Superior (CNBES). También existen universidades privadas y empresas que disponen de esa opción.
Si consigues una beca podrás destinar el dinero ya ahorrado para el transporte, la alimentación y los útiles necesarios para culminar tus estudios de forma satisfactoria.
Como bien sabes, el tiempo corre, así que si ya estás a punto de iniciar la universidad, no te preocupes. No sólo podrás acometer los puntos mencionados anteriormente, sino que además podrás trabajar mientras estudias tu licenciatura.
Puedes conseguir un trabajo dentro de la universidad o uno externo de medio tiempo. Cualquiera de los dos te ayudará con tus gastos universitarios.
Aplicando estos métodos podrás evitar los dolores de cabeza de los llamados préstamos bancarios, si no en su totalidad, sí en un gran porcentaje. Así que no tengas miedo y toma en cuenta lo que has aprendido hoy y, ¡empieza ahora!
No olvides cuál es tu meta de ahorro y recuerda que culminar tus estudios universitarios te traerá grandes beneficios personales, económicos y sociales.
¿Quieres leer más contenidos interesantes como éste? Si es así, ¡suscríbete a nuestro newsletter!